La reunión, como siempre, era los lunes a las nueve de la mañana, cuando todavía no sabías cómo estaba la planta. Eso te obligaba a preparar toda la información el viernes por la tarde, cuando más cansado estabas y más ganas tenías de marcharte. Pero la clave para la empresa siempre ha sido la mejora y esfuerzo de todos los que formamos la compañía para dar ese salto cualitativo que necesitábamos.
Mejora y esfuerzo, un pilar fundamental para tu empresa
Al principio era pesado y áspero, pero después de varios meses y de ver los resultados, yo esperaba esa última hora para desconectarme del resto del mundo, cerrar los ojos y repasar lo que había pasado a lo largo de la semana. Eso me servía para recapacitar y darme cuenta de errores que había cometido y que necesitaban enmienda.
Cuando llegué, repartí los informes y al momento fueron llegando todos. Cuando acabé aquella reunión, todos me miraron con cara de satisfacción y aunque los resultados que había presentado no eran del todo satisfactorios, la dirección me dio la enhorabuena por la claridad de la presentación y la explicación de cómo íbamos a afrontar los problemas que se nos habían presentado. Eso, me dio fuerzas y agradecí a Resultae que implantara esa forma de trabajar.
Es la primera vez que presentas un informe contundente, me dijeron ellos. Me felicitaron y a continuación añadieron: tú eres el reflejo del trabajo que hemos hecho y lo que al principio era desorientación e incomprensión, ahora es todo claridad, mejora y esfuerzo para seguir adelante. Es como ver crecer al hijo.
Contacta con resultae, y consigue mejorar la productividad de tu empresa
