La rentabilidad es una de las cuestiones básicas para tu empresa ya sea grande, mediana o pequeña. En RESULTAE somos expertos en conseguir ahorros de más de un 25%, dependiendo de los costes, que mejoran directamente la Tesorería y Capital Circulante.
Para alcanzar la rentabilidad que esperas, las empresas desarrollan estrategias que apuntan normalmente a las ventas. Pero hay otra serie de aspectos como la reducción de los costes y de los gastos, que no son lo mismo.
La gestión eficiente de las compras o el incremento del margen y de la rentabilidad por producto/servicio se deben tener muy en cuenta y son esenciales para ganar más
Cualquier empresa busca maximizar su rentabilidad en el menor tiempo posible. Para lograrlo, no basta únicamente con trabajo. Hay que trabajar bien y para ello es necesario optimizar la rentabilidad en todas sus versiones, ya sea financiera –la que mide el capital propio– o económica –la mide los capitales invertidos, antes de los impuestos–. La eficacia y la eficiencia son dos elementos fundamentales para la optimización de la rentabilidad de una empresa.
Sí, pero…
¿Cómo mejorar la rentabilidad de mi empresa?
Puedo saber si mi negocio es rentable, y si es bueno o no, manejando el margen bruto sobre mis ventas. Es decir, restando a las ventas los costes directos o coste de las ventas.
Ventas – Costes Directos o coste de ventas = Margen Bruto
¿Qué son los costes directos o coste de las ventas?
Son los costes del producto, comerciales y logísticos.
Los costes del producto son los costes de comprar y o producir lo que vendes.
Los costes comerciales son todos los costes de todo lo que produces o vendes
Los costes logísticos son los costes de transporte y almacén
Ventas – Costes del producto – Costes de comercializar – Costes logísticos = Margen Bruto
De acuerdo, y
¿cómo puedo mejorar el coste bruto de mi empresa?
1.- Reduciendo costes:
Comprando más barato, negociando comisiones, rediseñando el muestrario…
2.- Mejorando la productividad:
Implantando un sistema de mejora de la productividad
3.- Cambiando el mix de clientes:
Analizando los segmentos de clientes y deshaciéndose de lo no rentables, así como las zonas geográficas
4.- Cambiando el mix de productos:
Eliminando los productos menos rentables y potenciando los más rentables
¿Cómo puedo saber si mi negocio es rentable?
Conociendo el porcentaje de tu margen bruto.
Si tienes un porcentaje alto, de más del 20%, tienes un buen negocio. Pero cuidado, hemos visto porcentajes de margen bruto del 35% con costes de estructura muy altos en instalaciones, RRPP, I+D+i, por ejemplo.
Si tienes un porcentaje bajo, inferior al 20%, al 10%, suele ser un mal negocio, dependiendo del sector, claro, excepto si se trata de un negocio de mucha rotación y poco margen.
Si tienes un porcentaje menos del 10%, está claro: no es un buen negocio. Y casi siempre es por una mala gestión de la empresa.
El margen bruto es muy buen indicador, pero siempre hay que llegar hasta el final, ya que todas las empresas pagan intereses, tienen amortizaciones y pagan impuestos, por lo que la clave está en el Beneficio Neto.