En el mundo de la empresa, se habla constantemente de liderazgo o gestión, como si fueran sinónimos. Sin embargo, aunque ambos conceptos estén estrechamente relacionados, representan realidades muy distintas dentro de una organización. Comprender esa diferencia es clave para el crecimiento sostenible de cualquier equipo o empresa.
Leadership, liderar, da idea de acción, por el contrario gestionar es un concepto totalmente diferente. La palabra ‘lead’, conducir, viene de una palabra anglosajona común a todas las lenguas de Europa del Norte, que significa camino, la ruta de un barco en el mar. Cuando lideras correctamente todos te siguen y confían en ti.
Se sabe que el siguiente paso será Managing, gestión. Viene del latín manus, mano, y tiene que ver con manejar una espada, un vehículo, un caballo, y por lo general está más vinculada a la idea de máquina. La gestión tuvo sus orígenes en el siglo XIX, cuando los economistas y los ingenieros se hacen cargo de los equipos empresariales y tratan de poner sistema.
¿Lideras o gestionas? Dos conceptos diferentes
Hay muchos ingredientes de gestión que no están incluidos en el liderazgo.
Gestionar tiene mucho que ver con la idea de administrar, especialmente en finanzas y administración. Los líderes no necesariamente son buenos administradores ni buenos gestores de recursos. Y a veces lo mejor es el mix de los dos: por ejemplo el caso de ZARA donde el tándem formado por un líder, Amancio Ortega y un gestor, Pablo Isla, funciona a la perfección.
Un líder inspira a los demás, y esto está directamente vinculado con el entusiasmo y la dedicación del líder y su capacidad de comunicar ese entusiasmo a los demás, compartiéndolo y entusiasmándolos al mismo tiempo.
El liderazgo tiene que ver con el trabajo en equipo, ya que los equipos tienen líderes y los líderes tienden a crear equipos.
A una persona se le puede nombrar gestor, pero no líder. Y es que sólo será líder cuando se gane el corazón y la cabeza de las personas que trabajan para ella, cuando haya una aceptación de esa persona entre sus seguidores. Por eso los que hemos dirigido empresas y hemos jugado en equipos sabemos que un líder comparte 3 cosas:
- La necesidad de realizar una tarea en común.
- La necesidad de mantenerse como una unidad, como un grupo cohesionado.
- La suma de las necesidades individuales del grupo.
Y lo más importante de todo: el fracaso de una de estas tres, afecta a las otras dos. Por esa razón hay que saber cómo liderar y realizarlo correctamente.
El lean manufacturing para tu empresa
Descubre el recurso que ayuda a las empresas a seleccionar herramientas según sus necesidades operativas.
Cosas a tener en cuenta para liderar
Para liderar hace falta:
- Definir las tareas y objetivos del grupo, hacer un plan.
- Ponerlo en marcha, adjudicando tareas y poniendo normas al grupo.
- Mantener las normas e impulsar las decisiones.
- Apoyar, es decir crear espíritu de equipo, aplicar medidas disciplinarias y saber aliviar las tensiones con humor y superar los desacuerdos.
- Comunicar, informar, poner en claro las ideas y los planes, resumir ideas y sugerencias.
- Evaluar, comprobar las posibilidades de las ideas y comprobar las consecuencias, ayudar al grupo y evaluar.
Liderar no consiste simplemente en dar órdenes, sino en crear un entorno donde las personas puedan crecer, confiar y actuar con autonomía. El verdadero liderazgo se apoya en la comunicación, la empatía y la capacidad de conectar los objetivos individuales con los colectivos.
Un buen líder combina visión y acción, inspira con el ejemplo y mantiene la cohesión del grupo incluso en momentos difíciles. En cambio, la gestión —aunque necesaria— se centra más en procesos y sistemas. Ambas son piezas del mismo puzzle: una da dirección y propósito, la otra aporta estructura y método.
En la práctica, el equilibrio entre liderazgo y gestión determina la salud organizativa. Cuando falta liderazgo, las empresas pierden motivación y visión. Cuando falta gestión, reina el caos operativo. La clave está en reconocer cuándo liderar y cuándo gestionar.
Preguntas frecuentes sobre liderazgo y gestión
¿Se puede aprender a liderar o es una habilidad innata?
El liderazgo se puede desarrollar con práctica, autoconocimiento y experiencia. Aunque algunas personas poseen carisma natural o habilidades sociales más desarrolladas, liderar con eficacia depende más de la capacidad de escuchar, comunicar y generar confianza
¿Por qué no todos los buenos gestores son buenos líderes?
Porque la gestión se centra en los procesos, mientras que el liderazgo se enfoca en las personas.
¿Puede una empresa funcionar solo con líderes y sin gestores?
No, porque la gestión es esencial para mantener la operatividad. Los líderes marcan el rumbo, pero los gestores garantizan que los recursos, tiempos y tareas se ejecuten correctamente.
¿Qué errores son más comunes al liderar un equipo?
Uno de los errores más comunes es confundir autoridad con liderazgo. Y otro importante, es no comunicar claramente los objetivos o no escuchar las necesidades del equipo.
¿Cómo se puede pasar de gestor a líder?
El cambio comienza por entender que liderar no es controlar, sino guiar. Se trata de desarrollar habilidades blandas como la empatía, la comunicación y la escucha activa.
¿Por qué algunas organizaciones no fomentan el liderazgo?
Porque prefieren mantener estructuras jerárquicas que favorecen el control. Sin embargo, en el contexto actual de cambio y transformación digital, las empresas más exitosas son aquellas que promueven líderes
¿Quieres detectar de raíz los problemas que frenan tu productividad?
Solicita ahora un diagnóstico rápido y descubre en qué puntos tu planta puede mejorar.
Liderar y gestionar no son términos intercambiables. Liderar es inspirar, comunicar, cohesionar y guiar. Gestionar es planificar, organizar y controlar. Las empresas más sólidas son las que logran integrar ambos enfoques: un liderazgo que motive y una gestión que sostenga.